Pablo Burillo Fotografía

Soy Pablo Burillo y me dedico especialmente a la fotografía de bodas desde Tomelloso. Mi propuesta es clara: fotografías con alma. Y un punto. Me apasiona narrar historias reales a través de imágenes sencillas, naturales y espontáneas; imágenes que surgen cuando las personas se olvidan de la cámara y se dejan ser. Mi enfoque es documental: observo y cuento lo que ocurre frente a mí sin forzar poses ni montar escenas artificiales. Trabajo para que vosotros seáis los protagonistas —no las fotos— y para que cada mirada, abrazo o gesto conserve la autenticidad del momento. Si os emociona lo cotidiano, si preferís evitar el postureo y buscáis un reportaje honesto y atemporal, mi forma de trabajar encaja con lo que necesitáis. Antes del gran día me gusta conocer vuestra historia: cómo os conocisteis, los lugares que os importan y aquello que os mueve. Esa conversación es la base para generar confianza y que la fotografía funcione sin interferencias. En la boda intento pasar lo más desapercibido posible, creando un clima de tranquilidad donde la gente pueda mostrarse tal como es. Mi presencia es discreta, atenta y siempre orientada a preservar la naturalidad del evento. Acompaño a parejas que valoran la sensibilidad visual y la sinceridad documental. Me implico en cada encargo con respeto y criterio estético para que el reportaje no solo recuerde lo que pasó, sino que transmita cómo se sintió. Ofrezco soluciones a medida según lo que queráis contar y el ritmo de vuestro día: desde el relato íntimo y pausado hasta la cobertura de los pequeños detalles que construyen la memoria colectiva de la boda. Trabajo desde Castilla‑La Mancha y me encanta viajar para alcanzar vuestro rincón especial. Si lo que queréis son fotos de boda que respiren verdad y emoción, contadme vuestra idea y conversemos: me interesa escuchar, comprender y, sobre todo, acompañaros en la aventura de convertir vuestro día en imágenes con sentido.